Por Guillermo Garza
Seamos honestos, hoy en día las empresas hablan un solo idioma, EBITDA y es razonable, no estamos hablando de empresas de filantropía, las empresas existen para generar rentabilidad a sus inversionistas, pero ¿dónde quedaron los clientes?
En este inmenso mar de marcas y productos que duran en el anaquel menos tiempo que los huevos que tengo en el refrigerador, es imposible hablar de una marca que realmente se preocupe por ti.
Estamos en medio de la peor época del consumismo, donde las empresas confundieron la innovación con la productización.
En vez de buscar soluciones integrales a las necesidades de los clientes, simplemente se lanzan extensiones de marcas exitosas con nuevos empaques, y a eso le llaman innovación.
¿Por qué no miramos a los clientes? ¿Por qué no enfocarnos a capturar su potencial?
Imaginemos a Jorge, Jorge es un estudiante de carrera que tiene 23 años, le gusta la tecnología y le gusta estar a la moda, Jorge y sus amigos se la viven en comunidades sociales como Facebook y Twitter, y se enteran de las nuevas redes sociales tan rápido como si vivieran en Estados Unidos, simplemente porque es «Cool».
Jorge tiene un problema, le encanta tener un celular Cool pero los planes que tenemos en México no se enfocan en lo más mínimo en él. Lo que Jorge quiere es un plan que le permita disfrutar de las redes sociales, tener el mejor celular disponible, poder hablar con sus amigos (hablamos de una lista de 30 números) y poderlo hacer cuando quiera y como quiera todo por un costo fijo.
¿Por qué las empresas se preocupan en lanzar productos cada vez más complejos que ni los ejecutivos pueden explicar?
Keep it Simple, Jorge tiene destinados 1500 pesos al mes en gadgets, telefonía e internet, ¿por qué no ser su proveedor integral?
¿Por qué no hay un paquete le ofrezca a Jorge siempre tenerlo actualizado?
Imaginemos un paquete donde por una renta al mes Jorge pueda hablar con sus 30 números, cambiar 1 vez al año su celular, tener el servicio 3 G en su iPad y en su celular y todo sin tener que preocuparse por estar contratando cada cosa con un proveedor distinto
La siguiente vez que vayan a lanzar un producto piensen en los clientes, a menos que vayan a lanzar un producto realmente innovador y que responda a una necesidad no cubierta con otro producto.Mejor enfóquense en cubrir las necesidades de cada segmento de clientes de la manera más completa, y en vez de hablar de «participaciones de mercado», hablemos de «participaciones por cliente», de cada cliente ¿con qué parte de su presupuesto me quedo? ahí está el dinero y el futuro del marketing.